martes, 24 de mayo de 2011

El desafío de ser líderes positivos.

Es una gran emoción culminar estudios. No importa el grado o la especialidad. Es reconfortante superar etapas y mirar atrás el duro camino recorrido con éxito. Muchas veces, solo nos concentramos en el esfuerzo y la incomodidad al ir cuesta arriba para alcanzar un objetivo, sin embargo es esta la experiencia que se valora y recuerda hasta con cierta melancolía. Es el titulo alcanzado un detalle que reconoce el esfuerzo, sin embargo es el proceso de preparación el que nos enriquece y trasforma en mejores profesionales y Dios quiera, también en mejores personas. Estoy seguro que una carrera profesional puede ser cambiada con estudios de MBA, pero dudo que unos estudios de MBA pueda cambiar el tipo de liderazgo que tiene un profesional.

El desafío de ser líderes positivos recién comienza al reinsertarse nuevamente a la vida profesional, es allí donde están los casos reales a resolver, negociaciones que realizar, innovaciones que implementar. Es el ranking personal que solo acaba con el último suspiro del alma. Ser profesionales educados en Latinoamérica es un gran compromiso del que muchos colegas nunca se enteran, o evitan hacerlo. Pensar en mejorar “mi carrera” o “mi familia”, de ninguna manera es incorrecto. El inconveniente “nace” cuando solo busco mejorar “mi futuro”, sin tener en cuenta aquellos que esperan ser beneficiados con la externalidad positiva de nuestra educación, o olvido devolver la ayuda a aquellos que nos apoyaron desinteresadamente a llegar donde hoy estamos.


Estoy seguro de que el camino a ser un líder positivo no será fácil, pero también estoy seguro que disfrutaré del proceso como las demás etapas que me tocaron vivír. Es el comienzo de un mundo de decisiones profesionales que tomar y valores personales que defender. Inicia el compromiso a cumplir, con mi familia, con mis creencias, con mis sueños. 

sábado, 14 de mayo de 2011

Wishlist – The blending between past and the hereafter.

                        

En mi cuenta de Amazon.com tengo el wishlist lleno y aunque no los compre le sirve a la empresa para que ellos conozcan mis gustos y preferencias y seguir ofreciéndome ese producto en mi pagina de inicio de usuario y para ofrecerme artículos asociados. Podríamos hacer lo mismo en los shoppings, restaurants o tiendas de conveniencia físicas? Quizás si! Veamos…

Lo primero que debería hacer es contar con tecnología de comunicación wifi en el local y una plataforma wap y web como tienda virtual (catalogo y mapa). Supongamos que es un supermercado. Al ingresar al lugar cuando el cliente llega se lo invita a conectarse con su dispositivo móvil a la tienda virtual. Crear su cuenta es tan fácil como ingresar su correo electrónico y nombre, o bien se le da la opción de vincularlo con su cuenta de Facebook o Twitter que sería aun más conveniente a los efectos de información para la empresa. El cliente observará en su dispositivo un mapa del local donde está localizado cada producto para que le sea más fácil encontrarlo. El allí ya podrá incluir cada articulo en su “canasta virtual” y luego deberá traerlo e incluirlo en su canasta física. De esa manera una va haciendo su wish list y luego eso le ayuda al cliente a:
  • No olvidar ningún articulo.
  • Agilizar su proceso de compra. (localiza productos y pago sin espera).
  • Tener un histórico de sus compras para control financiero.

Al caminar por los pasillos automáticamente el localizador del teléfono le permitirá al cliente saber los artículos que están más próximos a el y con eso se potenciará las compras impulsivas. El cliente luego de cargar todos los artículos a su canasta física podrá pasar por la caja y pagarlo como se hace actualmente o podrá pagarlo con medios virtuales con su mismo dispositivo. Si decide hacerlo de la segunda forma automáticamente se enviará un comprobante a su cuenta de correo registrada a una caja especial dentro de la tienda que luego solo verificará cada ítem y finalmente despachará al cliente.
La empresa luego podrá no solo tener acceso a la cantidad de artículos que el cliente compró como lo tiene hoy, sino que podrá además tener datos de:
  • Cuanto tiempo el cliente estuvo en el supermercado.
  • Que productos vio y no los compro. (wish list). Podremos pronosticar la demanda.
  • Que pasillos recorrió primero y luego cuales otros.
  •  Cuales son los pasillos más visitados por cada tipo de cliente.
Esta mezcla entre las compras físicas con las virtuales considero será el inicio de un mundo mucho más virtual en donde cada vez las compras serán más por vía electrónica. Esta experiencia permitirá al cliente “confiar” en la tecnología acompañando todo el proceso. Luego el cliente se familiarizará con el procedimiento y cuando disponga de menos tiempo o priorice otras actividades hará las compras virtuales 100%, solicitando un delivery.

Siempre que realizamos una compra inconscientemente vivimos una experiencia. Lo que uno más recuerda de ella es normalmente el proceso final, que es el de pago. No conozco a alguien que le guste esperar en fila para realizar el pago o esperar a que el mesero le acerque su cuenta. Esta es una desagradable experiencia para el cliente ya que además de tener que hacer algo que si pudiese elegirlo hacer no lo haría, debe esperar para hacerlo. Es por eso que la ultima aplicación mencionada dentro de la idea “wish list” que incluye el pago por medios electrónicos virtuales nos permitirá recordar un proceso sano, agil y no es tan traumante ya que uno no “entrega su dinero” a otra persona, o firma un voucher, sino que simplemente da un par de clicks y se olvida del asunto.

Esta idea además de supermercados podríamos a aplicarla a restaurantes. El cliente llega y en su cuenta observa cual es la mesa que esta reservada a su nombre, un mesero puede acercársele y ofrecerle la carta física, sin embargo también tienen el catalogo de comidas donde uno puede solicitar su plato tal cual dice en la carta o “customizarlo” con ingredientes según su preferencia. Este pedido se envía directamente al cheff, se procesa el plato y sale de manera agil y reduce ampliamente el margen de error ya que existen menos intermediarios. En el caso que no haya determinado plato se podrá tener en el wish list del cliente los platos que pidió pero que no pudieron ser satisfechos por la empresa de esa manera se podrá estimar la demanda y preferencias de las personas, cosa que cuando el mozo directamente rechaza la compra no se computa por lo tanto no se tiene datos estadísticos de ello. Es difícil pronosticar la demanda porque esta no solo son los productos vendidos, sino que incluyen también aquellos solicitados pero que no pudieron ser satisfechos. Wish list además de registrar las preferencias del cliente también te permite estimar demanda de una manera más fiable. Como el cliente ya está familiarizado con el proceso electrónico se podría utilizarlo para realizar el pago, ya que como mencionamos anteriormente, esperar la cuenta es una situación bastante incomoda que reduce la satisfacción del cliente en su experiencia de compra.

Es claro que en este ensayo no contempla todos los asuntos y detalles necesarios para la implementación de esta tecnología-experiencia, solo busca dar un pantallazo general de la idea que será un hecho en un par de años.